BAUER, fabricante alemán de compresores especializado en equipos de alta presión para aplicaciones de aire respirable, ha presentado el nuevo PE-MVE, que completa la serie POSEIDOM EDITION, con un tamaño reducido y amplias prestaciones.
En el diseño de este nuevo modelo, BAUER se ha basado en los requerimientos de sus clientes. La unidad la forma una cabeza compresora de tres etapas y una presión máxima de 350 barg. Según indica el fabricante, esta cabeza compresora está muy experimentada y diseñada para trabajar más de 30.000 horas. El nuevo modelo está disponible en dos tamaños, el PE 250 MVE, con una capacidad de 250 l/min y el PE 300 MVE de 300 l/min. Ambas unidades incorporan motores trifásicos de 5,5 kW y 7,5 kW respectivamente.
El nuevo PE-MVE incorpora un sistema de filtración (P31) que incluye un separador de agua y aceite integrado, así como la válvula de retención y presión mínima. La calidad del aire se ajusta a la norma DIN EN 12021, siempre que el equipo esté instalado y funcionando según las recomendaciones del manual del compresor.
El sistema de control electrónico es el encargado de operar el equipo de purga automática. El condensado generado puede recogerse en un recipiente y eliminarse con los procedimientos medioambientales apropiados.
El motor está instalado en la base del equipo, sobre una bancada especial que permite la tensión automática de las correas trapezoidales. El conjunto está integrado en el interior de un carenado con protección acústica de gran efectividad.
El equipo base está disponible para su utilización, pero BAUER ofrece un equipamiento opcional con el que mejorar las prestaciones. Destacan los sistemas de control de los cartuchos por tiempo de trabajo o por saturación, muy recomendables en todas las aplicaciones de aire respirable.
También resulta muy interesante el AERO-GUARD, un accesorio opcional con el que es posible reducir a un tercio del valor aspirado, el contenido de CO2 en el aire respirable. Las concentraciones de CO2 en el aire aspirado son cada vez mayores, debido a los problemas medioambientales y esto está generando serios problemas a las empresas embotelladoras para conseguir los estándares de calidad exigidos por la normativa. Este accesorio de BAUER permite reducir la concentración de CO2 y ajustar la calidad del aire a los valores requeridos.
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