FACSA ha participado de forma activa en la Jornada de Innovación organizado por el centro tecnológico AINIA. Durante la sesión, Rubén García Tirado, técnico de I+D+i de FACSA, ha expuesto los avances del proyecto Bioedaria.

El proyecto tiene como objetivo la transformación de los procesos de tratamiento de lodos que se producen en las Estaciones de Depuración de Aguas Residuales (EDAR) en biorrefinerías capaces de generar productos de valor añadido, convirtiendo los residuos en recursos.

Actualmente, el proyecto Bioedaria estudia cómo es posible transformar los residuos en nuevos productos como biogás, bioplásticos o biofertilizantes, a través de la aplicación combinada de distintos procesos biotecnológicos, como la digestión anaerobia en doble fase, el cultivo de microalgas y la bioacumulación de polihidroxialcanoatos (PHA) y biofosfatos (Poli-P).

El proyecto se inició en marzo de 2019 y se prolongará hasta finales del presente año, ha sido financiado por la Agencia Valencia de la Innovación (AVI) y cuenta con la colaboración del Centro Tecnológico AINIA, que se encarga de la experimentación a escala de laboratorio y de prestar el asesoramiento técnico necesario.