Este video de Acciona explica cómo funciona el ciclo integral del agua. Todo comienza con la captación del agua de los embalses o del mar, impulsada por tuberías en la planta de tratamiento, pasa por un proceso de desalación y potabilización para almacenarse en depósitos con los mayores estándares de calidad.

A continuación, se bombea a los depósitos de regulación, antes de pasar a las tuberías que distribuyen el agua a cada hogar, instalación o servicio.

A través de la red de saneamiento se lleva el agua residual a depuradoras en las que se somete a diversos tratamientos antes de ser devuelta al medio ambiente o ser utilizada para diferentes usos.

Las plataformas de gestión de mantenimiento de activos de aguas integradas en el sistema de información geográfica, facilita mediante inteligencia artificial, información continuada sobre todas las infraestructuras asociadas al servicio de saneamiento y abastecimiento y permite detectar al momento cualquier incidencia.