BASF y MAN Energy Solutions han iniciado una asociación estratégica para continuar con la construcción de una bomba de calor a escala industrial en las instalaciones de BASF en Ludwigshafen. Este proyecto pretende hacer una importante contribución a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, estableciendo el uso de tecnologías bajas en CO2 en la producción química y reduciendo el consumo de gas natural actual. Como primer paso, los socios del proyecto están realizando un estudio de viabilidad que se espera quede terminado a finales de 2022.
La bomba de calor a gran escala planificada permitirá la producción de vapor utilizando electricidad a partir de energías renovables, aprovechando el calor residual del sistema de agua de refrigeración de BASF como fuente de energía térmica. El calor residual en el agua se procesará mediante compresión para producir vapor que alimentará a la red de vapor de sus instalaciones. Al integrar la bomba de calor planificada en la infraestructura de producción de la fábrica, se pueden producir hasta 150 toneladas métricas de vapor por hora, lo que equivale a una producción térmica de 120 megavatios. El proyecto podría reducir las emisiones de CO2 en estas instalaciones hasta llegar a las 390.000 toneladas métricas por año. Al mismo tiempo, haría que el sistema de refrigeración por agua fuera más eficiente y menos dependiente de las condiciones climáticas y meteorológicas.
El vapor es la fuente de energía más importante en la industria química. En Ludwigshafen, BASF requiere alrededor de 20 millones de toneladas métricas de vapor por año. La planta requiere de mucho vapor en muchos de los procesos de producción, como por ejemplo, para secar productos, calentar reactores o para destilar. Alrededor de la mitad del vapor requerido en Ludwigshafen ya se produce recuperando el calor dichas instalaciones mediante un proceso bajo en CO2. La demanda restante de vapor, aproximadamente el 50 por ciento, se cubre con centrales eléctricas de gas y vapor, que emiten CO2 durante la generación.
Dr. Martin Brudermüller, Presidente del Directorio Ejecutivo de BASF SE: “A mediano plazo, queremos reducir nuestras emisiones de CO2 en un 25 por ciento para 2030. El uso de tecnologías como las grandes bombas de calor, que ya existen y pueden ampliarse a tamaño industrial, nos acerca mucho más a este objetivo. En nuestra cooperación con MAN Energy Solutions, combinamos la experiencia de un complejo químico en Verbund con el conocimiento necesario para la implementación tecnológica de un proyecto como este. Esta tecnología también tiene el potencial de allanar el camino para proyectos en otras instalaciones de BASF”.
Dr. Uwe Lauber, CEO de MAN Energy Solutions SE, comentó: “Estamos ansiosos por la estrecha colaboración con BASF. La calefacción de espacios y el calor de proceso representan alrededor de un tercio de las emisiones de gases de efecto invernadero en Alemania. Junto con BASF, queremos abordar esta importante palanca con una solución innovadora. Estamos convencidos de que nuestra solución de bomba de calor puede contribuir decisivamente a un suministro de vapor respetuoso con el medio ambiente en la planta de Ludwigshafen. BASF es pionera mundial en la transformación de energía en la industria química, un modelo a seguir para el despliegue de tecnologías innovadoras para proteger el planeta y un gran socio de proyectos. Tanto la industria como la protección del clima dependen de las innovaciones que surgen de asociaciones tan sólidas”.
Dr. Uwe Liebelt, presidente de European Verbund Sites, BASF SE: “La transformación que tenemos por delante requiere, sobre todo, apertura a las nuevas tecnologías. En Ludwigshafen, estamos probando y desarrollando varias tecnologías y procesos alternativos para reemplazar los combustibles fósiles, esto incluye la producción eléctrica de vapor. Proteger el clima implica no solo evitar las emisiones de gases de efecto invernadero, sino también utilizar la energía de forma sostenible: las bombas de calor industriales permiten ambas cosas. En el futuro, serán una parte esencial de la infraestructura de energía sostenible en la planta de Ludwigshafen”.
Con este proyecto, los dos socios quieren ganar experiencia en la integración y operación de bombas de calor a escala industrial y allanar el camino para la estandarización y el despliegue de la tecnología en otras plantas. Los resultados del estudio de viabilidad con respecto a la viabilidad económica, la eficiencia y la competitividad de la tecnología formarán la base para el posterior proceso de toma de decisiones para la construcción de la bomba de calor.
BASF se ha fijado el objetivo de alcanzar cero emisiones netas de CO2 para 2050. Además del uso de energías renovables y el aumento de la eficiencia energética en la producción, nuevas tecnologías como la electrificación de la producción de vapor contribuirán a cumplir este objetivo. La ampliación de estos procesos respetuosos con el clima a un nivel industrial influirá decisivamente en la transformación hacia una producción química baja en CO2.
MAN Energy Solutions ha puesto las soluciones técnicas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero de la industria, la producción de energía y el transporte marítimo en el centro de su estrategia futura. Además de las tecnologías para evitar las emisiones nocivas, la empresa se centra especialmente en la reducción o compensación de las emisiones residuales inevitables de la industria.