SENER, White Summit Capital, Castleton Commodities International (CCI), Nortegas y Bizkaia Energía pondrán en marcha la primera planta de hidrógeno verde que aprovecha las infraestructuras de una central de generación convencional y de la red de gas de distribución a nivel nacional en Amorebieta (Bizkaia).
El proyecto consiste en el desarrollo de una planta de hidrógeno verde con una capacidad de 20 MW en las infraestructuras existentes de gas y electricidad de la central de ciclo combinado (CCGT) de Amorebieta-Boroa. El objetivo es generar 1.500 toneladas de hidrógeno verde por año provenientes de fuentes 100 % renovables, a través de certificados de origen y PPAs (Power Purchase Agreements) verdes, que evitarán la emisión de más de 12.000 toneladas de CO2 a la atmósfera.
Parte del hidrógeno verde generado se empleará en la planta de CCGT, alimentada por gas, de Bizkaia Energía, para reducir las emisiones de CO2. Además, el hidrógeno se inyectará en la red actual de distribución de Nortegas, donde se mezclará con gas natural, descarbonizando una parte de los consumos energéticos actuales.
Este hidrógeno podrá estar dedicado también en parte, a cubrir necesidades de suministro específicas de H2 en la industria local, o al almacenamiento de hidrógeno líquido a través de portadores químicos.
Por último, se instalará una estación de servicio de H2 (hidrogenera) para el transporte de las flotas público-privadas locales de vehículos pesados.
Gracias al estratégico emplazamiento de la central, y a las ventajas competitivas que aporta el proyecto, parte de la producción de H2 podría exportarse o valorizarse a través de la venta de certificados de origen a otros países europeos.
Este proyecto, que será desarrollado, además, a través de un modelo de gemelo digital, pionero a nivel nacional, es el primero de estas características para el desarrollo del hidrógeno como fuente de energía sostenible. Para ello, se comprometerá una inversión inicial de 50 millones de euros, que permitirán que la planta comience a operar a finales de 2022, con la intención de ampliar la capacidad de generación a 200 MW antes de 2030, lo que implicaría una inversión total de 300 millones de euros.