La ciudad de Montpellier ha confiado a Veolia, a través de sus filiales OTV y Veolia Eau France, las obras de ampliación y mejora, así como la explotación de la depuradora de Maera, situada en la localidad de Lattes. OTV dirigirá un consorcio formado por Veolia Eau, Razel Bec, GTM TP GC SO, Egis Eau, Cabinet Merlin, Bouygues Energies and Services, Tourre Sanchis Architectes, AI Project, así como numerosos actores locales.
Este contrato de 9 años, valorado en 165 millones de euros, permitirá a la planta de tratamiento de aguas residuales de Maera, mediante un enfoque de desarrollo sostenible, producir el doble de energía de la que necesita y reutilizar las aguas regeneradas.
Las obras de ampliación aumentarán gradualmente la capacidad de tratamiento de la planta de 470.000 a 695.000 habitantes equivalentes (Hab-eq), cubriendo las necesidades de 19 municipios. A finales de 2023 se alcanzará un aumento inicial de la capacidad de 50.000 Hab-eq para responder a los retos inmediatos de desarrollo urbano de la metrópoli.
El proyecto incluye algunas de las tecnologías emblemáticas del Grupo Veolia, que no solo mejorará la calidad del tratamiento en la planta actual, sino que también permitirá la producción de energía y la reutilización de las aguas regeneradas. Veolia seguirá explotando la planta durante toda la duración de las obras y durante los cuatro años siguientes -es decir, nueve años en total-, garantizando la continuidad permanente del servicio y la gestión de la huella hídrica y de carbono.
Este proyecto contribuye al “Plan Territorial Clima-Aire-Energía” de Montpellier al reducir la huella de carbono de la depuradora, producir energías renovables y preservar los recursos hídricos.
Una vez finalizadas las obras, la depuradora de Maera permitirá la producción de energías renovables (biometano, calor y electricidad) para cubrir el 205% de su consumo energético hasta 2031. La planta también reducirá sus emisiones netas de CO2 a más de la mitad gracias a la optimización de su consumo energético y a la maximización de la recuperación de energía de los subproductos. El exceso de energía producida se utilizará, entre otras cosas, para suministrar gas a 9.000 hogares y calefacción a más de 7.500.
El diseño compacto de la planta también liberará 2.500 m2 de espacio destinado a la regeneración de las aguas, lo que hará posible la reutilización de 70.000 m3/d. Esta agua se utilizará para usos industriales internos y también se reutilizará, entre otras cosas, para las necesidades agrícolas.
El proyecto Maera forma parte de un piloto agroecológico para reutilizar las aguas regeneradas en la agricultura. Se creará un huerto en la azotea y unos invernaderos en el suelo que se regarán con esta agua, además de emplearse en otros usos como para el control de incendios, la limpieza de calles, espacios públicos y redes, el riego de zonas verdes o cualquier otro cultivo cercano al lugar. Este piloto agroecológico es operado por nuestro socio DV2E.
Dado el contexto actual de cambio climático y los importantes impactos que está teniendo en el ciclo del agua (inundaciones, sequías), las ciudades deben evolucionar para ser más resilientes, capaces de resistir y adaptarse a los imprevistos. A partir de 2025, Maera se beneficiará de un centro de control a la altura del reto. Verdadera herramienta de gestión y decisión, el centro de dirección se organizará en torno a un sistema de información que permitirá gestionar diariamente los sistemas de la planta en tiempo real, controlar el rendimiento de la planta y anticiparse a las fuertes lluvias para minimizar los vertidos y gestionar las crisis.